EE UU • 9 DE AGOSTO DE 2010
Las autoridades antidrogas de
los Estados Unidos descubrieron que un narcotraficante mexicano utilizaba el
negocio de las galleras y de las peleas de perros “Pit Bull” para encubrir sus
operaciones de narcotráfico y de lavado de dinero.
Pedro Méndez Ramos de 41
años y con domicilio en Church Point en Los Ángeles, fue sentenciado la
semana pasada a 12 años y medio en prisión federal, seguido de 5 años de
libertad supervisada por la jueza Patricia Minaldi, por cargos de lavado de
dinero a través de redes de galleras y peleas de perros. Ramos y otros 17
individuos fueron imputados en los operativos antidrogas denominados “Fowl Play
y Rio Gallo”, bajo cargos narcotráfico y lavado de dinero, así como porte
ilegal de armas de fuego. Ramos y los otros transportaban la droga desde
Brownsville en el estado de Texas hacia Church Point y luego distribuía el
narcótico en la Florida, Tennesse, Misisipi, Georgia y en Louisiana.
Con más de
300 gallos de pelea y 60 perros de la raza Pit Bull, Ramos utilizaba estos
juegos ilegales para la red del narcotráfico, atrayendo a potenciales distribuidores
que transportaran cocaína y marihuana suplidas directamente por miembros del
Cártel del Golfo localizado en Matamoros en México. Habilitó compartimentos
secretos para ocultar y transportar las drogas fabricando un doble fondo en las
jaulas. Los negocios de las drogas le generaban tanto dinero que Ramos intentó
comprar la refinería de petróleo “Canal Oil Refinery” localizada en Church
Point en Los Ángeles y de esta manera tener un instrumento mayor para lavar
dinero en gran escala.
Fuente: Diario
Horizonte
No hay comentarios:
Publicar un comentario