Por:
Leonora Esquivel
MÉXICO 5 DE MARZO DE 2013
Los aficionados a la tortura hacia los animales han
puesto de moda declarar “Patrimonio cultural” todos aquellos
espectáculos que están siendo amenazados por una tendencia de la sociedad de
respeto a los animales que intenta abolirlos. El último caso es la aprobación
por parte de la Legislatura del Estado de Zacatecas de la Declaratoria de las
Peleas de Gallos como Patrimonio Cultural Inmaterial.
Luego de que surgieran varias voces a favor y en
contra, los Diputados Locales aprobaron la iniciativa por ser considerada una
tradición mexicana, “parte de las tradiciones, símbolos, mitos y lenguajes que
hay en nuestro estado.” Además se le considera fuente de empleo para muchas
personas en diversos municipios. A pesar de que otras voces señalaron que las
peleas de este tipo deberían ser prohibidas, por su contenido de violencia y
sangre, además del maltrato animal, los integrantes de la Legislatura aprobaron
esta declaratoria con 19 votos a favor, 3 en contra y una abstención.
Las peleas más antiguas de las que tenemos noticia
ocurrían en Asia hace 2500 años y es posible que mil años antes se hicieran en
la India. Posteriormente, esta práctica fue llevada a América por los
conquistadores españoles. Se dice que Cortés le presentó una a Moctezuma para
impresionarlo. Normalmente se lleva a cabo en una arena o palenque. Para que un ave se declare
ganadora debe dejar a su adversario inhabilitado para seguir peleando. En
algunos casos hay gallos con “poca casta” que huyen de la pelea al estar
heridos en cuyo caso pierden el combate o la pelea. En la mayoría de los casos
se realizan apuestas sobre el resultado de la contienda, lo cual le añade a
este evento el alcoholismo de sus participantes y por lo general, la portación
de armas. Mucho se ha dicho también de que son sitios de lavado de dinero
procedente de fuentes ilícitas.
En algunas regiones los gallos son equipados con
espolones artificiales de plástico, carey, hueso de pescado, acero, etc. que
permiten que las aves puedan herir a su oponente más fácilmente que con sus
espolones naturales. En otras variaciones los espolones naturales son cubiertos
con una envoltura de tela o cuero para prolongar el combate. Otra modalidad de
arma en la pelea de gallos es la utilización de navajas en las patas del animal
con medidas y formas variables (desde 1/4 pulgada hasta 4 pulgadas). En algunos
de los países donde se llevan a cabo peleas con navajas usan veneno (lo cual es
totalmente ilegal) para acabar más rápidamente con el rival. Es fácil notar que
un gallo fue envenenado ya que la parte de abajo del gallo se pone verde o
azul, se debilita y es casi imposible salvarlo debido a los golpes que recibe y
al veneno. Las peleas se practican en Guatemala, Estados Unidos, México,
Nicaragua, Honduras, Perú y Filipinas.
Como en el caso de la tauromaquia, los motivos que
exponen sus defensores son la tradición, la cultura, la economía de quienes
trabajan en torno a eso. Todo puede ser refutado con argumentos sólidos, como
el que algo sea una tradición no justifica per se que se siga manteniendo, la
cultura cambia con el tiempo y se adapta a nuevas tendencias, las cuales cada
vez más incluyen el respeto a otros seres sintientes. La cultura no está por
encima de la ética. El narcotráfico, la venta de armas yla trata de personas
también son negocios que mantienen muchas familias, no por ello los vamos a
permitir. Siempre hay opciones lícitas para ganarse la vida. Es cuestionable
hacerlo a costa de la vida de otros.
Quienes han asistido a corridas de toros han
expresado su desagrado por las peleas de gallos considerándolas “salvajes y
sanguinarias”. Moralmente no hay diferencia alguna: la especie no es un
atenuante a la hora de causar sufrimiento innecesario, pero esta comparación
nos hace pensar en la gravedad del asunto. Tal vez seamos más propensos a
atacar la tauromaquia porque nos resulta impresionante ver a un animal de casi
500 kilos vomitando sangre y siendo atravesado por banderillas, puntas y espada
durante 20 minutos. Nos sentimos más próximos a un bovino que a un ave. La
mirada frontal tiende a generar más empatía. Sin embargo, el dolor por el que
pasan las aves durante una pelea, y su muerte, prácticamente desangrados por
las navajas del “oponente”, no son tema menor. Estos espectáculos son
presenciados por niños, a quienes incluso se les entrena como galleros y en un
futuro continuarán con este negocio de sangre.
¿Qué beneficio obtienen los legisladores que votaron
a favor de la declaratoria de las peleas de gallos como patrimonio inmateria de
Zacatecas? Mantener el ciclo de violencia, legalizarlo, legitimarlo. Cuando en
el mundo la tendencia es implementar una educación más respetuosa con el medio
ambiente y sus demás habitantes, en México retrocedemos. Un gobierno que
permite que se sigan maltratando animales como espectáculo tiene no sólo una
limitada sensibilidad, sino una nula visión de hacia dónde debemos avanzar para
frenar de raiz el problema de la violencia.
Si para ti las peleas de gallos no deberían ser
patrimonio cultural de México, firma la siguiente petición:
http://www.change.org/es/peticiones/yo-no-reconozco-las-peleas-de-gallos-como-mi-patrimonio-cultural
y expresa tu descontento al Gobernador Miguel Alonso
Reyes:
Fuente:
El
Mercurio Digital
Las peleas de gallos crean fuentes de trabajo estoy a favor de ellas y para hablar de estas se necesita tener conocimiento hay diputados que tienen algunas organizaciones de defensa a los animales y eso solo lo hacen para ganar votos a favor, pero ellos no saben en realidad como es la vida de un gallo de pelea su vida es digna no como las aves de las empresas como bachoco eso si es nefasto los invito a que vean los videos de como los matan y de la disque vida que llevan que es muy poca dentro de su empresa e insisto muchos viven de las peleas de gallos. los apoyo al 100 (vivan las peleas de gallos) INFORMATE , INVESTIGA NO TIRES A LO LOCO
ResponderEliminarDE ACUERDO
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