La imagen es de El
Heraldo de Xalapa
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TEOCELO,
VERACRUZ | 28 DE
ENERO DE 2013
Pese a la prohibición municipal que existe en esta
localidad, vecinos de la calle Rubén Darío llevaron a cabo el octavo encierro
en el que fueron soltados en la vía pública dos toros y tres vaquillas, que
fueron toreados por cerca de dos horas. Desde el mediodía cientos de personas
se dieron cita en la céntrica calle para presenciar el espectáculo que inició
con más de hora y media de retraso. Las casas de la zona fueron protegidas con
tablas y láminas para resguardar a los lugareños y turistas que acudieron al
evento.
Poco importó que desde julio pasado el gobierno
municipal firmara un documento para convertir a Teocelo en el primer municipio
de México que prohíbe las corridas, encierros, vaquilladas y cualquier evento
en el que se aplique maltrato o crueldad a los animales. La avenida en más de
tres cuadras fue cerrada a la circulación y en las casas de la zona se
colocaron cartulinas fluorescentes con la leyenda: "No nos hacemos
responsables de la integridad física de las personas que asistan al evento.
Diviértete sanamente. No maltrates a los animales". Los que hicieron su
agosto fueron los dueños de las casas, ya que los lugares "seguros"
eran ofrecidos hasta 30 pesos.
En punto de la 1:30 de la tarde comenzó el evento.
Fueron liberadas tres vaquillas y dos toros de regular tamaño que sufrieron del
maltrato de los improvisados toreros. Sin hacer distinciones, los animales se
llevaban entre las patas a fanáticos de la tauromaquia y a socorristas, entre
ellos a un paramédico que aguardaba cerca de la ambulancia. De acuerdo con
elementos de Cruz Ámbar, no hubo ningún lesionado de gravedad y la mayoría de
las atenciones que se prestaron fueron por raspones, caídas y golpes que se
dieron en la carrera frente a las vaquillas.
Mientras algunas personas disfrutaron del encierro y
se congregaron en familia a presenciarlo, un sector de la población condenó
este acto. "Es un grupo de personas que se ha empeñado en defender estas
corridas alegando una falsa tradición y en el fondo lo único que quieren es
hacer desmanes, señaló Josefina, vecina de la calle 5 de Mayo. El ayuntamiento
de Teocelo no brindó vigilancia o protección al evento y únicamente una
solitaria ambulancia de la Secretaría de Salud estatal acudió a prestar
servicios de ayuda.
Fuente:
Diario de
Xalapa
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