VERACRUZ | 2 DE FEBRERO DE 2013
Parte importante de las fiestas
de este lugar son los toros, pero ayer, durante el paseo en balsas sobre el río
Papaloapan, antes de ser soltados en las calles, un astado -el tercero de seis-
murió ahogado al no ser correctamente transportado por los lancheros durante el
embalse. Como resultado de las corretizas que los toros metieron a los osados o
descuidados, llegaron al hospital de Tlacotalpan tres personas lesionadas, una
de ellas de gravedad.
Luego del inicio del embalse de
toros, alrededor del mediodía, los dos primeros ejemplares llegaron sin
problema alguno a la orilla del río del lado de Tlacotalpan. Sin embargo, el
tercer toro no alcanzó a pisar tierra firme, pues justo a unos metros de la
orilla y al intentar enderezar la lancha para soltarlo, las malas maniobras de
quienes lo traían atado a un costado de la lancha hizo que el toro se
sumergiera. Primero se fue la cabeza y luego todo su cuerpo. Cuando quienes
transportaban al toro reaccionaron lo primero que hicieron fue jalarlo de la
cola, por lo que la cabeza del toro se hundió aún más.
Luego intentaron sujetarlo y
sacarlo a flote con la cuerda con la que venía amarrado, pero ya era demasiado
tarde, el toro había tragado y respirado demasiada agua y estaba moribundo. De
momento empezó a flotar y los lancheros que lo transportaban recibieron la
rechifla de todos los presentes y una serie indescriptible de recordatorios por
el mal trabajo realizado.
El toro fue tendido a la orilla
del río, donde se intentó reanimarlo, pero nada se pudo hacer, y aunque el
enojo de la gente era grande, la fiesta tenía que seguir y finalmente el toro
fue remolcado por una lancha y salió de ese lugar flotando, tal y como llegó,
por el río.
Los cinco toros que pisaron
tierra del lado de Tlacotalpan se vieron sujetos a una serie de golpes,
torceduras de cola, botellazos e incluso algunos se montaron en su lomo de lo
manso que se comportaron. A tanto azote los animales reaccionaron, y como
resultado de ello hubo una serie de espantados, de personas que tropezaron e
incluso alguno que recibió raspones. El saldo, de acuerdo con el secretario de
Salud, Pablo Anaya, fue de tres personas lesionadas -dos con raspones que
ameritaron intervención médica y uno que ameritó ser trasladado al Hospital
General de Veracruz.
Cabe referir que el traslado
fue por tierra debido que no se pudo utilizar el helicóptero, toda vez que la
altura podía afectar la presión en el cerebro del paciente y causarle una
lesión más severa. Este último paciente sufrió traumatismo craneoencefálico.
Una de las versiones indica que el toro lo embistió y lo proyectó contra una de
las barreras, donde se pegó en la cabeza, provocándole la lesión. Otra de las
versiones es que andaba tomando, resbaló y se lesionó en la cabeza, y una
última es que el toro lo espantó y, al tratar de correr y debido al estado
etílico en que se encontraba, resbaló, provocándose dicha lesión.
Fuente: Diario de Xalapa
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