sábado, 1 de marzo de 2014

Al menos 13 obreros resultaron expuestos tras fuga en almacén nuclear de Nuevo México


EE UU |  27 DE FEBRERO DE 2014
Al menos 13 trabajadores del mayor depósito de desperdicios nucleares de Estados Unidos resultaron contaminados al ser expuestos a la radiación, revelaron exámenes realizados tras la fuga radiactiva del pasado 14 de febrero. Los trabajadores de la Planta Piloto de Aislamiento de Desechos (WIPP), ubicada cerca de Carlsbad, en el sur de Nuevo México, dieron positivo al “americio-241”, una de las partículas de radiación emitidas por los residuos transuránicos que son depositado en el sitio.
El Departamento de Energía (DOE) de Estados Unidos, a cargo de la administración del WIPP, informó que los trabajadores afectados fueron notificados el pasado miércoles sobre la situación. “Es prematuro especular sobre los efectos en la salud de estas personas por los resultados preliminares”, dijo a través de un comunicado el gerente de la Oficina del DOE en Carlsbad, Joe Franco. "Sin embargo, el muestreo en el lugar y las monitoreos de vigilancia del medio ambiente, hasta la fecha, siguen apoyando los resultados del Centro Nacional de Asesoría sobre Emisiones Atmosféricas, que indican que la contaminación en el aire se ubica probablemente en niveles muy bajos", indicó.
El pasado 14 de febrero el WIPP registró una fuga de radiación en la planta subterránea, donde son depositados los desperdicios nucleares. Una semana después también se detectó radiación en un filtro de aire en la superficie, ubicado a un kilómetro de distancia del sitio. El DOE aseguró, sin embargo, que no existía ninguna amenaza de contaminación radiactiva para las comunidades del sureste de Nuevo México a raíz de la fuga.
El WIPP es el único depósito en Estados Unidos para residuos transuránicos, comúnmente conocida como residuos "TRU“, que es material radiactivo generado por el programa de armas nucleares durante la época de la Guerra Fría. El depósito comenzó a aceptar envíos desde las instalaciones nucleares de todo el país en 1999. Los residuos se colocan a 655 metros bajo tierra, en una antigua formación de sal.
Fuente: Vanguardia

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